Detrás del éxito del Proyecto AjeBótica hay algo que no se ve en los tableros ni en las fichas de puntos: la implicación del profesorado y su formación continua. El cambio metodológico que implica este proyecto solo es posible cuando el equipo docente cree en él, se forma y lo hace suyo.
Desde su nacimiento, AjeBótica ha ido creciendo gracias al entusiasmo, la curiosidad y la capacidad de innovación del claustro del CEIP La Vega, que ha participado activamente en:
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Grupos de trabajo sobre ajedrez educativo y gamificación.
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Seminarios de formación sobre robótica y pensamiento computacional.
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Jornadas de buenas prácticas en centros de la red pública.
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Encuentros entre docentes para compartir experiencias y materiales.
🔄 Aprender para transformar
La formación docente ha permitido:
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Entender el ajedrez como un recurso transversal.
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Conocer herramientas digitales como Bee-Bot, Tinkercad, Chess.com, etc.
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Diseñar actividades evaluables desde las áreas curriculares.
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Generar una cultura metodológica común en el centro.
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Abrir nuevas vías de colaboración con otros centros.
🌱 Cuando el profesorado se forma… el alumnado florece
El Proyecto AjeBótica no impone, propone. Y eso solo funciona cuando el equipo docente se siente acompañado, formado y valorado. Por eso, es fundamental que cualquier centro que desee implementar un proyecto similar:
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Organice formaciones internas adaptadas a su contexto.
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Fomente la reflexión conjunta y la adaptación progresiva.
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Genere tiempos de coordinación y espacios compartidos.
✨ El ajedrez empieza en el aula… pero se construye en el claustro
AjeBótica ha demostrado que no hay innovación real sin formación docente. Porque cuando un maestro o una maestra se forma con ilusión, el impacto llega directamente a su alumnado.

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